Desde el Área de Terapia Ocupacional se ha creado un Cubo Sensorial que permite trabajar, junto con otras técnicas o conceptos, terapias sensoriales de manera más específica.
El Cubo Sensorial es un espacio específico, en el que podemos trabajar experiencias sensoriales controladas. Realizar terapias dentro del cubo, nos permite inhibir estímulos sensoriales y activar solo los que queremos, para trabajar así, objetivos concretos y observar resultados causa-efecto de manera más directa. Además, se facilita al paciente la concentración en las actividades propuestas, consiguiendo un gran trabajo, emocional, cognitivo-conductual, sensoperceptivo y psicomotor.
El espacio sensorial, aunque se trata de una sala individual aislada, se encuentra dentro del departamento de Terapia Ocupacional del Centro Lescer, lo que nos permite, en caso que la situación lo requiera y pueda llevarse a cabo, unir la terapia sensorial con otro tipo de tareas más complejas relacionadas con la capacidad para realizar actividades de la vida diaria.
Nuestros compañeros del Área de Terapia Ocupacional nos responden a unas preguntas en relación al Cubo Sensorial.
¿En qué tipo de pacientes se emplea el Cubo Sensorial?
No está limitado a ninguna patología neurológica ni a ningún paciente tipo, pero si es más efectivo en pacientes en estado de mínima respuesta, con alteraciones sensoperceptivas, personas con alteraciones conductuales o con déficits atencionales severos. En ocasiones, utilizamos la sala como zona de trabajo para recuperar AVDB (Actividades de la vida diaria) más íntimas.
¿Qué aspectos positivos y negativos tiene el Cubo Sensorial?
Positivo podríamos decir, todo. El cubo sensorial es una herramienta de trabajo que ayuda, por supuesto, al paciente en su rehabilitación, pero también es una ayuda para el terapeuta ya que se deja de lado el imprevisto. Nos permite trabajar desde los componentes de ejecución más básicos hacia los más complejos en función de las respuestas del paciente. Además podemos personalizar la sala a la persona y familiares, intentando crear una inversión en su vida cotidiana.
Como «cosas negativas», por llamarlas de alguna manera, podríamos decir que te encuentras más limitado de recursos si la sesión no sale como estaba planeada, la sala es pequeña en comparación con otras instalaciones del centro y hay veces que limita la asistencia de familia y alumnos de prácticas. Es un trabajo extra para el terapeuta antes, durante y tras la sesión, por la preparación que requiere y la necesidad de guardar resultados y datos.
¿Cómo se llegó al nombre Cubo Sensorial?
La verdad no sabría decir en qué momento salió la idea de «Cubo Sensorial», creo que fue cuando se planeó la obra y la sala iba a tener forma de cubo…lo que teníamos claro es que la palabra sensorial no podía faltar, pues es el elemento principal de trabajo, los sentidos y lo que percibimos e interpretamos a través de ellos.
¿Por qué no una sala snoezelen?
Las terapeutas de Lescer tratamos a personas adultas, en su mayoría, con daño cerebral sobrevenido. La definición de sala Snoezelen se nos quedaba limitada en algunos aspectos con la idea que teníamos en mente. Solemos decir que es un híbrido entre sala Snoezelen y sala preparada para trabajar integración sensorial, este último término tampoco nos cuadraba por el tipo de paciente, por los objetivos y el espacio.
Lo que estaba claro es que el espacio sensorial nos tenía que permitir encontrar vías de entrada a través de los sentidos que nos permitieran ir sumando respuestas para llegar a conseguir el máximo de función en nuestros pacientes.
strong>¿Qué otros usos se pueden dar a este cubo?
Como hemos dicho antes, en ocasiones la utilizamos para tratar a personas con alteraciones conductuales o para el trabajo de AVDB como el vestido o la higiene íntima.
A veces utilizan el cubo otros profesionales como logopedas, fisioterapeutas o neuropsicólogos, para dar continuidad a las terapias en beneficio del paciente.
¿Cuáles fueron las necesidades reales que llevaron a la creación del cubo?
Pues esto es un resumen de todo lo expuesto hasta ahora. En Lescer buscamos siempre dar lo más novedoso y beneficioso para nuestros pacientes y la creación del Cubo Sensorial es algo más. Es una herramienta específica que nos ayuda en nuestro trabajo diario.
Personas que tenían más dificultades para seguir las terapias o cuyos objetivos de tratamiento tardaban más tiempo en cumplirse, actualmente se están beneficiando de este proyecto.
Objetivos de tratamiento.
De manera muy resumida, podemos decir que los objetivos de los tratamientos llevados a cabo en el Cubo Sensorial, no distan mucho de los objetivos realizados en sala. La diferencia está en su especificidad para luego ser generalizados.
Estos tratamientos están basados en la CIF y están relacionados con todos los items que abarcan funciones sensoriales y procesos cognitivos básicos que nos llevan a la acción y posterior función. Así podríamos hablar, por ejemplo, de estimulación táctil o función vestibular para provocar movimientos voluntarios dirigidos a un fin.
El objetivo final, es conseguir siempre la máxima funcionalidad y autonomía de las personas para disfrutar de una vida digna.
